Ya está a la venta el nuevo disco de Timbiriche, de nombre Timbiriche 25, el cual conmemora, obviamente, las “bodas de plata” del grupo. En el disco vienen canciones clásicas de Timbiriche, pero diferentes, muy diferentes, (perdón por el “cantinfleo”).
Timbiriche 25, es una especie de auto homenaje, de auto covers, mas no de auto fusilones (disculpen mi castellano). Es un disco que sí, retoma quizá lo más emblemático del grupo, pero de una manera muy distinta. Y ese es el mérito del disco, que tiene mucho de arriesgado.
Se vale decir: “¿por qué no graban temas inéditos?”, pues sí, pero en serio, lo parecen. La única similitud es la lírica, nada más.
Nuevos ritmos, nuevos, arreglos, nuevas voces. Una producción totalmente diferente.
La verdad, es un disco valiente, pues se reta a los fans, a los acostumbrados a su música. Lo digo con beneplácito y sorpresa, nunca pensé decir esto de Timbiriche.
Escúchenlo, ya verán que lo que les digo es cierto.
A mí, me gustó, si a ustedes no les gusta, les aseguro que lo menos se sorprenderán.
Destacan diferentes colaboraciones en la producción, por ahí está Aleks Syntek, Chetes, Jay de la Cueva… todos ellos comandados principalmente por Erick Rubín y Benny. De Benny, hemos tenido noticias recientes, quizá no tantas de Erick, quien aquí confirma que tiene un talento bárbaro para hacer música. No cabe duda, en Timbiriche hay artistas, en verdad; no sé qué tanto lo puedan explotar juntos, o por cuánto tiempo. Pero ahora, su credibilidad no está en duda.
Timbiriche 25, es un disco mucho más difícil de escuchar que lo anterior que nos habían presentado, es menos pegajoso, en lo que a estribillos se refiere; los ritmos son más complejos. Es una producción completamente ajena a lo que los niños suelen escuchar.
Escuché ya este disco varias veces, y no deja de sorprenderme, parece más bien como si otros artistas se hubieran juntado para hacer un tributo a Timbiriche. De hecho, sí, son otros artistas, aquí se comprueba.
Pudieron haber grabado un disco en vivo, como lo hicieron en su reencuentro anterior, no, no lo hicieron, se la rifaron, en la música el arriesgue es muy aplaudido. Bienvenida la nueva música, yo a este cd, lo catalogo como música nueva.
Es interesante escuchar Princesa Tibetana sin la muy característica voz de Erick, o Soy un Desastre, sin las primeras notas de Diego.
Escuchar la nueva versión de La vida es mejor cantando es un deleite, le da un nuevo sentido.
Bien Timbiriche, ahora sí, felices 25. La celebración está completa.
Por: Poncho Vera
Fuente: cronica.com.mx
Tuesday, July 31, 2007
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